Una portada de libro. En la parte superior aparece el título: "Hija de la Venganza" en la parte inferior el autor: Michael McDowell. En el centro de la portada aparecen dos chicas de perfil mirándose la una a la otra con ropa de época (finales de 1800). Detrás de ella hay una ciuidad, un barco por un río y un sol que se asoma por unas nubes. La portada tiene mucha decoración por sus laterales (mano de lectura, carta, calavera, estrella, calavera, signo de dolar y cara de diablo)

Vamos con la tercera parte (de cuatro) comentando Hija de la Venganza en el club de lectura online de Librería Luces. Podéis ver mi resumen/comentarios de las partes 1 (páginas 1-100) y 2 (101 a 200). Recordad que salvo la primera parte, todo está lleno de destripes (spoilers).

La novela mantiene el ritmo de las otras dos partes y se lee del tirón, yo me leí las primeras 93 páginas de este tramo de un tirón. Y esta tarde/noche pienso leerme del tirón todo lo que queda de novela. Lo que sí debo decir un poco en contra de McDowell es que los personajes en esta novela son todos buenos o malos, no hay ninguna clase de escala de grises y eso es poco realista… No sé si ese mismo problema ocurrirá en Blackwater (que pienso empezar a leer en cuanto acabe este libro y Sinsonte).

Retomando el hilo de pensamientos del final de la anterior parte, las tiendas de un dólar son lugares donde los hombres van a buscar jovencitas guapas con las que tener aventuras. Y por lo que hablan Ella y Philo en la casa, está claro que es una forma de prostitución. Muy turbio lo que deben hacer para ganarse la vida las mujeres jóvenes de la época en ciudades como Nueva York.

Si las páginas anteriores ya tenían bastantes casualidades, en esta tramo de la novela se disparan a mansalva. Y es curioso porque en otros libros, o incluso series de televisión, esas casualidades pueden llegar a molestar, pero McDowell logra con su escritura que no importen ni molesten.

Estas casualidades empiezan con el encuentro con Henry Maitland, junto al que pasa una velada maravillosa y prometen encontrarse de nuevo a la vuelta de las vacaciones de él. Pero cada golpe de suerte que tiene Philo, viene acompañado de algo terrible y en este caso es que una compañera de piso, que se ha dado a la fuga, le ha robado el dinero (justa la misma que le dijo que no lo llevase encima y lo escondiera).

Por otro lado cuando volvemos con los Slape, cada vez podemos tener más claro que Katie sí tiene poderes reales. Lo que sabe y hace a mi ya no me deja lugar a dudas. Espero que en ningún momento vayan a decir que esto es intuición o investigación porque no quedaría creíble.

Me ha parecido curioso como de simplones ponen a los Slape puesto que no son capaces casi ni de recordar bien lo que pasó en la granja. Que por cierto ven a unos familiares de Hannah que les mandará una carta que los Slape rechazarán, un error tremendo. Y, por cierto, que cantidad de crímenes cometen por toda esta parte.

Volviendo con Philo decide no volver a la tienda de un dólar y se va a buscar trabajo. Esto hace que se ecuentre con Nedda, la madre de Henry Maitland. Otra de esas casualidades de este tramo de novela. Philo le hace un pequeño favor y la señora le ofrece que vaya a casa a que le devuelva el dinero. A Nedda le cae tan bien que la acaba convirtiendo en su secretaría.

Ni que decir tiene que el momento más disfrutable de la novela es cuando Jewell llega a la casa de su tía abuela y ve allí a Philo, se da cuenta de que trabaja para ella y que se va a ir de vacaciones con ellas.

Toda la parte de las vacaciones, aunque Philo va a trabajar de secretaría, ya la abordaré en el siguiente artículo aunque haya un capítulo en este tramo.

Antes del viaje, Ella le llevará la carta rechazada por los Slape, trabajaba en correos, y Philo y su amiga irán a ver la casa. Katie las verá de lejos aunque Philo va disfrazada con un velo que le tapa la cara. Ella se acercará para fingir que quiere que le echen las cartas, por desgracia Katie lo sabe y la matará. Pero ahora que saben que Philo está en la ciudad y les conoce, huirán bajo otros nombres y se separarán durante un tiempo.

por McAllus

Soy Isaías, conocido en redes como McAllus. Jugador de rol, juegos de mesa y videojuegos. Adoro leer y escribir.